28.2.06

Jonas vs Spielberg

Leo en el blog de cine la enésima polémica levantada por Munich. Esta cobra más importancia que ninguna debido al individuo que emite la queja: Georges Jonas, autor de la novela "Venganza", en la que Spielberg se basó para hacer la película.

Jonas acusa a Spielberg de haber tergiversado el mensaje moral de su novela. Argumenta que, el no equiparó a los agentes del Mossad con los terroristas, ni que Avner, el prota, dudó sobre la ética de su misión.

Son demasiadas quejas, pero esta, tiene una trascendencia especial.

23.2.06

Judío joven y francés asesinado II


El crimen antisemita acaecido en la añeja República Francesa relatado por Carlos Semprún Maura. Ofrece el prisma que los medios franceses no han deseado otorgar: El racismo implícito en el crimen.


Descanse en paz Ilan Halimi. Vendedor de móviles de 23 años de edad asesinado por ser judío.




ACTUALIZADO: Han capturado en Costa de Marfil, a Yosef Fofana, cerebro del secuestro y asesinato de Ilan Halimi.

ACTUALIZADO: 33.000 personas se manifiestan en París por el horroroso asesinato antijudío de Ilan Halimi.



21.2.06

La infamia entre rejas


Tres años. Por negar el crimen más horrendo, vergonzoso y abominable de la desastrosa Humanidad. Por negar que seis millones de personas fueron -con el beneplácito del mundo entero- recluidos social y legislativamente, humillados, hacinados en guetos, deportados en trenes para ganado, internados en campos infernales de trabajo y exterminio, ahorcados, fusilados, gaseados, quemados, utilizados como ratones para diabólicos experimentos científicos; utilizados su pelo para almohadas, su ceniza para asfalto, su piel para botones...Por negar la voladura de los límites humanos y la consumación de milenios de injusticia y sufrimiento incontables...

Por negar lo evidente...-en la película El Creyente, su protagonista, Daniel Ballint, replica a un amigo skinhead que si el Holocausto no existió, por qué Hitler es un héroe entonces.

Aunque me parezcan unas vacaciones -el delito está penado con 10 años-, es un paso firme y de una importancia extraordinaria. La legislación cae encima del revisionismo en Europa. En Austria, nada menos. La infamia negacionista, desde Chomsky hasta el depuesto David Irving, es una marea letal que extiende sus tentáculos -sobre todo por la red- tergiversando la historia y escupiendo, constantemente, no sólo contra los seis millones de judíos asesinados, si no contra toda la humanidad. El Holocausto fue, y es, un problema humano. Sin fisuras.





Confío en que Irving no sea el único. Espero que, muchos más de estos desalmados morales, de estos asesinos de la palabra, vayan a parar detrás de unas rejas.

19.2.06

Judío joven y francés asesinado

Sólo aportaré el titular y el enlace de la noticia, -no tengo energía para otra cosa:

Joven judío secuestrado y torturado a muerte por una banda, en Francia.

Ser judío sigue siendo causa de muerte...

(vía: Eurabian news)

16.2.06

Robert L. Stevenson


Respecto a la generación de hoy, presumo que muy pocos llegarán a saber quién es. Ya en la mía, escaseaban los que -al menos- habían escuchado su nombre.

Yo, afortunado de mí, tuve la suerte de ser agraciado, en mi décimo cumpleaños, con un ejemplar de La isla del tesoro.







El Cultural publica hoy, dos cuentos inéditos de Robert Louis Stevenson, aquel escritor escocés que alumbró las noches del verano en el que cumplí diez años.



13.2.06

Paradise now o la humanización del

fanatismo (II)

Os animo, a todos aquellos que tengais la convicción de que el terrorismo, fanático o laico, no tiene justificación, a que le dediqueis unas palabritas a este blogger que humaniza el integrismo asesino de los terroristas palestinos ayudándose de una conmovedora crítica a la película candidata al Oscar a la mejor película de habla no inglesa.



A vueltas con Munich

Interesante análisis -uno más en la extensa lista- que realiza Marcelo Birmajer sobre Munich. Como también lo es, y mucho más profundo y explorable, el post que dedica Cine y Política.

Ya escribí que, Spielberg, con su úlitma película, no ha logrado las metas que se planteó en la misma. Pero, incontestablemente, lo que si ha conseguido es retorcer el intelecto de sionistas, cinéfilos, apólíticos...y todo el elenco de personas los cuales han visto agitada su inquietud al acudir a las salas a ver el film.

11.2.06

Woody Allen Jazz Band


El blog de la banda de jazz de Woody Allen.







Aunque prefiero, con abismal distancia, su cine a su jazz, es una parcela de su arte bastante atractiva.




Sartori


En pocas palabras presenta, Giovanni Sartori, un escueto análisis sobre las elecciones democráticas en ambientes retrógados e integristas.

La autodestrucción de la democracia


La clamorosa victoria de Hamas en las elecciones palestinas del 25 de enero pasado ha replanteado un problema sobre el que ya se discutía en los años cuarenta: si la democracia puede matar a la democracia. Porque Hamas no es sólo una organización terrorista; es también la expresión de un fundamentalismo islámico que rechaza frontalmente la idea misma de la democracia. Por esto, no podemos cerrar los ojos sobre el islam. El problema es demasiado grande para dar la impresión de que no nos preocupa. Lo primero que hay que hacer es clarificar las ideas. Noes cierto que si hay elecciones hay democracia, o que las elecciones produzcan democracia. En Alemania, en 1933, unas elecciones mataron a una democracia. En Irán, ahora, el voto ha institucionalizado un despotismo reforzado. De por sí, unas elecciones son sólo un método para elegir a los jefes.

Por lo tanto, las elecciones son un instrumento de democracia, sólo se celebran en el contexto de un sistema de estructuras democráticas, y sólo si éstas están gestionadas por unos partidos que profesan unos valores democráticos. Lo que no es el caso ni de Hamas ni de los jomeinistas de Irán. Las elecciones no son una medicina que lo pueda curar todo. Tengámoslo bien presente para prevenir errores futuros, por lo que se refiere a los Hermanos Musulmanes de Egipto


(vía: La Vanguardia)

9.2.06

Coretta King

Hace unos meses, también le dediqué un pequeño homenaje a Rosa Lee Parks, esa costutera negra que no accedió a someterse al racismo público y móvil. Entonces, no fue con celeridad. Ahora, también me excedo en un par de semanas.

Mientras dormía, Coretta King, con 78 años de edad, la que fue esposa del más grande de los líderes pro derechos civiles en la América de la segregación, murió.

Coretta fundó en 1969, un año después de la muerte de su marido, el Centro Martin Luther King para el Cambio Social No Violento. Y, contribuyó, a terminar con una estructura social que chocaba de lleno con la Constitución imperante y contra toda democracia que se preciara. Gracias a ella, a su marido, a Rosa Parks, EEUU se convirtió en un país mejor para vivir, aboliendose leyes vigentes en Estados como Alabama, en donde la consideración personal de un negro era similar a la de los siervos en la Edad Media.

En 1983, Ronald Reagan, añadió a su palmarés otro gran triunfo. Declaró el día del nacimiento de Martin Luther King fiesta nacional.

Y, es conveniente destacar, para honrar sus memorias, unas palabras escritas por el pastor protestante que tuvo un sueño -un gran sueño- en su "Carta a un amigo antisionista" de 1967: "Los tiempos han convertido en impopular la manifestación abierta del odio a los judíos. Siendo éste el caso, el antisemita busca nuevas formas y foros en donde poder instalar su veneno. Ahora lo esconde tras una nueva máscara. ¡Ahora no odia a los judíos, solo es antisionista!"






Descansen en paz.

6.2.06

Sunshine

El sol se muere, y desde La Tierra, envían una expedición para intentar revivirlo. Una vez en la misión, los tripulantes pierden el control de la situación...

Sunshine, la próxima película de uno de mis directores favoritos, Danny Boyle (Tumba abierta, Trainspotting...) posee blog. Contiene reparto, equipo de realización, aspectos del film...

Bastante interesante para los admiradores de Boyle, para sus detractores o para cualquier espontáneo.

5.2.06

El cruzado danés

Reproduzco íntegramente la crónica que le dedica El Mundo hoy a Flemming Rose, redactor jefe del suplemento de Cultura que editó de las polémicas viñetas. No tiene desperdicio.

EL CRUZADO DANÉS

Pedro Poza Maupain. Copenhague

«Veo en los islamistas algo que veía en los bolcheviques: fanatismo, dogmatismo y disposición a usar la violencia contra quienes no comparten su opinión». Así es el periodista que publicó las caricaturas de Mahoma. No se arredra en una cruzada por la libertad en la que peligra su vida. Ni el recuerdo de los años que Salman Rushdie debió permanecer oculto, condenado a muerte por la teocracia iraní, ni el del brutal asesinato del cineasta holandés Theo van Gogh, tiroteado y acuchillado por un fanático, han quebrado la voluntad de Flemming Rose. El redactor jefe del suplemento de Cultura de Jyllands-Posten, el diario danés que publicó las polémicas caricaturas de Mahoma, sigue empecinado en su cruzada por la libertad de expresión y contra la autocensura: «Dinamarca debe defender los principios sobre los que se fundamenta nuestro modo de vida»

Una cruzada individual. Porque hasta que en estos días ha empezado a recibir el apoyo de otros medios europeos, este curtido periodista, licenciado en ruso y literatura, ex empleado de una organización danesa de ayuda a refugiados, antiguo corresponsal en Washington y Moscú, ha estado sometido a un desgaste inhumano, defendiendo casi en solitario, al menos en público, la decisión de publicar las viñetas de la ira. Doce ilustraciones, en la que se retrata, por ejemplo, a Mahoma con una bomba por turbante, que han hecho que el mundo islámico prácticamente en pleno se levante. El Islam prohíbe cualquier representación, incluso favorable, del profeta.«Un crimen», ha dicho Abdalá II de Jordania. «Decapitad a aquellos que insulten al profeta», se leía en las pancartas más radicales de las multitudinarias manifestaciones que los musulmanes han celebrado en todo el planeta.

Mientras, Flemming Rose, que lleva protección policial, ha acudido a debates y conferencias ante audiencias claramente predispuestas en su contra, se ha reunido con imanes indignados, ha concedido entrevistas a periodistas árabes hostiles, ha sido presionado por políticos, diplomáticos y empresarios, criticado, vilipendiado y amenazado. Y no ha dado un paso atrás. «No me arrepiento de haber sacado los dibujos, ni siquiera con lo que está pasando ahora. Estoy preocupado, claro, nunca imaginé reacciones tan salvajes. Lamento que haya gente que se sienta ofendida porque no era nuestra intención, pero no debemos pedir perdón por la publicación de las viñetas».
En realidad, para Rose, con su aspecto de adusto profesor de Filosofía, la controversia sobre las caricaturas no deja de ser un nuevo episodio en su denuncia del totalitarismo, primero desde las páginas de Berlingske Tidende, otro de los grandes diarios clásicos de Dinamarca, y ahora desde las de Jyllands-Posten.
A sus 47 años, encaja perfectamente en la categoría de intelectual liberal del siglo XXI, partidario de las libertades individuales y la economía de mercado, proestadounidense («Nunca un país ha hecho tanto por la Humanidad y ha recibido tan poco agradecimiento», escribió recientemente), crítico con el modelo escandinavo del estado del bienestar, enemigo de la inmigración masiva, y moderadamente escéptico ante las presuntas ventajas de la sociedad multicultural.

Las crónicas de Rose durante su larga etapa de corresponsal (ocho años en Moscú y tres en Washington) no fueron meros relatos de la realidad rusa o estadounidense, sino activas contribuciones a una lucha de ideas en la que no dudó en tomar partido, irritado por lo que define como ceguera de la izquierda danesa ante los desmanes del comunismo.

«No soy experto en Islam, pero veo en los islamistas algo que también veía en los bolcheviques. Un fanatismo, un dogmatismo y una disposición a monopolizar la verdad y a usar la violencia contra quienes no comparten su opinión. Tanto en el comunismo como en el islamismo subyace implícitamente que existe un enemigo humanamente inferior, sean intelectuales burgueses, campesinos o infieles. Los movimientos totalitarios son siempre pequeñas minorías. Hay un pequeño grupo al frente, muy activo y con unos valores muy firmes, que toma el poder porque la mayoría silenciosa no se le opone. Es evidente que ante el Islam algunas personas permanecen en silencio o evitan pronunciarse. Y eso es lo mismo que veía en la URSS, y quizá también ahora con Putin. Ese tipo de autocensura es peligrosa».

Esta fobia a la autocensura fue el detonante de las viñetas.«La idea», según el director de Jyllands-Posten, «surgió de forma casi casual y partió de un redactor de tropa. Preguntamos a unos 40 ilustradores si estarían dispuestos a dibujar a Mahoma, y 12 nos contestaron que sí».
Pese al mantra de que fue «una provocación por el mero hecho de provocar» que repiten los detractores del periódico, Rose mantiene que la publicación, el pasado 30 de septiembre, estuvo absolutamente justificada. «En el espacio de un par de semanas salieron a la luz cuatro casos clarísimos de autocensura por miedo al extremismo islámico. El autor de libros infantiles Kaare Bluitgen recibió tres negativas a ilustrar un libro sobre Mahoma, y quien al final lo hizo pidió que su nombre no figurase. Varios traductores europeos de Yo acuso, el libro de la diputada holandesa Ayaan Hirsi Ali (autora del guión de la película Sumisión de Theo van Gogh) también pidieron que no figurasen sus nombres.

En la Tate Gallery de Londres y en un museo de Gotemburgo se retiraron exposiciones relacionadas con el Islam por miedo a ofender a los musulmanes. Y se hizo sin preguntar ni a los artistas, ni a la Policía, ni a los propios musulmanes. Finalmente, en una reunión de Anders Fogh Rasmussen, primer ministro danés, con representantes de los musulmanes de Dinamarca, un imán le rogó que actuase para que el Islam fuese presentado de forma más positiva en los medios, es decir, le pidió que instaurase la censura».

Armado con estos argumentos y alguno más («En esta temporada se representan tres obras satíricas dirigidas contra Bush pero ninguna sobre Bin Laden y sus aliados»), Rose firmó el artículo que acompañaba las viñetas. «Algunos musulmanes rechazan la sociedad moderna y secular», escribió, «exigen un status especial que tome en consideración sus sentimientos religiosos. Es una postura irreconciliable con la democracia secular y la libertad de expresión, donde uno debe aceptar que puede ser objeto de burla, mofa y ridículo».

MOFARSE DE LA RELIGION

Esta última frase ha sido destacada por muchos de sus críticos como muestra de que la intención era provocar, e incluso como prueba de un delito de blasfemia, ya que la legislación danesa prohíbe mofarse de las religiones legalmente establecidas. Rose, sin embargo, les invita a que lean las siguientes frases: «Desde luego, no siempre es agradable y bonito de ver, y no significa que los sentimientos religiosos deban ridiculizarse a cualquier precio, pero en el presente contexto esto tiene una importancia menor. No es casual que en las sociedades totalitarias se encarcele a gente que hace bromas críticas sobre dictadores o los caricaturiza.Suele suceder alegándose que se ofenden los sentimientos del pueblo».

El artículo era típico de la nueva línea introducida por Rose en el suplemento cultural, que también trata grandes temas políticos.De hecho, fue nombrado redactor jefe para crear debate y dotar al suplemento de un perfil más internacional, más acorde con los nuevos tiempos de globalización. Rose no niega que la crítica de ciertos aspectos del Islam ha contribuido a definir la personalidad del suplemento, pero considera que ha sido ineludible: «Hoy en día, a nivel internacional, existen dos historias: una es la irrupción en la economía de mercado global de dos o tres mil millones de indios y chinos, y la otra trata sobre Oriente Medio, el Islam y el desafío político y de seguridad que plantea la democratización de esa parte del mundo».
La polémica sobre las caricaturas, no obstante, tardó en estallar.No lo hizo hasta mediados de octubre, cuando la Islamisk Trossamfund (sociedad de la fe islámica), una agrupación de organizaciones musulmanas cercanas al fundamentalismo aunque no decididamente extremistas, convocó una manifestación de protesta en Copenhague a la que asistieron unas 3.500 personas.

Poco después llegó la carta en que 11 embajadores de países musulmanes pedían al primer ministro que tomase medidas contra «el clima antimusulmán» que, según ellos, se respiraba en Dinamarca. En la misiva citaban un llamamiento racista pronunciado en una minúscula emisora de radio ultraderechista, un texto islamófobo aparecido en la web de una diputada del Partido Popular Danés (derecha populista antiinmigración y anti-UE) que ésta negó haber escrito, y unas declaraciones poco afortunadas del ministro de Cultura malinterpretadas de modo casi cómico por los embajadores.

De fondo subyacía el malestar existente en parte de los aproximadamente 180.000 musulmanes de Dinamarca por la franqueza a veces brutal con que se aborda en este país el asunto de la inmigración, muy alejada de los tabúes imperantes en la vecina Suecia.

La situación degeneró en crisis diplomática, con protestas de la Liga Arabe y la Organización de la Conferencia Islámica, y Rose empezó a quedarse solo, al menos en público. Después de recibir varias amenazas de muerte y por recomendación de la Policía, los autores de las caricaturas decidieron adoptar un perfil bajísimo y prácticamente dejaron de intervenir en el debate.

«PROVOCACION INFANTIL»

Las críticas, procedentes no sólo de círculos musulmanes, arreciaron.Políticos como Uffe Ellemann-Jensen, antiguo ministro de Exteriores y antecesor de Fogh al frente de los liberales, calificó las viñetas de «provocación infantil». Y buena parte del resto de la prensa acusó al Jyllands-Postenal de buscar una provocación fácil y sin sentido.

Los acontecimientos de los últimos días han traído nuevos e inesperados enemigos para Rose. Una portavoz de Arla Foods, el gigante sueco-danés de los productos lácteos y la empresa más afectada por el boicot comercial en los países musulmanes, manifestó que la publicación de las caricaturas «equivalía a orinar en el Muro de las Lamentaciones de Jerusalén». Hans Skov Christensen, presidente de Dansk Industri (la principal asociación de empresas de Dinamarca), exigió en una carta abierta que el diario explicase los motivos que le condujeron a publicar las viñetas.

En un debate televisivo celebrado el pasado jueves, Rose acuso a Christensen de «doblegarse» y se negó a que la responsabilidad del boicot recayera sobre su periódico: «La gente en Arabia Saudí y en los demás países no ha visto las ilustraciones ni ha leído mi artículo. La semana pasada, en una cumbre de la Liga Arabe, había sobre la mesa un dibujo de Mahoma en pleno acto sexual con animales y otro en el que aparecía con orejas y morro de cerdo. Y fueron mencionados en conexión con Jyllands-Posten, cuando estas caricaturas no han sido publicadas ni por nosotros ni por ningún otro diario danés. Y si éste es el nivel de información que existe al más alto nivel político, sólo cabe imaginarse cómo será en la calle».

BOICOT A DINAMARCA

«No existe un conflicto de intereses entre el mundo empresarial y Jyllands-Posten», añadía, «sino una convergencia, porque las libertades que tenemos en Dinamarca, nuestro sistema político y nuestra tradición de pensamiento crítico son condiciones necesarias para el bienestar y la riqueza de que disfrutamos. Tener una economía de mercado eficaz está en directa relación con tener una libertad de expresión relativamente ilimitada. No es casualidad que en Arabia Saudí compren queso feta danés. Un debate libre y abierto es imprescindible para crear tecnología, producción, etcétera».

Los dibujos obscenos que mencionaba Rose formaron parte del informe que Islamisk Trossamfund presentó en sus giras por Oriente Medio para recabar apoyo contra las caricaturas, y fueron supuestamente enviados de forma anónima a musulmanes que habían escrito cartas de protesta por las viñetas. Para Rose, los culpables de la escalada de protestas de los últimos días son «imanes radicales que viven en Dinamarca», alusión nada velada a figuras prominentes de Islamisk Trossamfund. Entre ellas, el palestino Ahmed Abu Laban y el sirio Abu Bashar, ambos refugiados políticos. O el libanés Raed Hlayhel, a quien se le concedió un permiso de residencia humanitario por tener un hijo que necesita tratamiento médico especializado y que amenazó con recurrir al Papa para que presionase al Gobierno danés. En Dinamarca, país de abrumadora mayoría luterano-evangélica, la autoridad del Santo Padre, no
ya política sino incluso moral es prácticamente nula.

Rose asegura que siente haber ofendido al mundo musulmán. Lo dijo en una entrevista con Al Yazira en la que, omisión casual o deliberada, el intérprete de la cadena no tradujo estas palabras.Pero sigue negándose a pedir perdón por la publicación de las ilustraciones. Aunque le fallen sus aliados. El primer ministro Fogh dice ahora que él nunca haría caricaturas religiosas, cuando en una entrevista concedida a Jyllands-Posten en octubre manifestaba: «La libertad de expresión debe utilizarse para la provocación».

Hasta el director del periódico, Carsten Juste, llegó a flaquear durante unas horas: «Si hubiese sabido lo que iba a pasar, no habría sacado las ilustraciones». Cuando, en el transcurso de una entrevista televisiva, le mostraron estas declaraciones (de las que Juste más o menos se ha retractado), Rose soltó un seco: «No estoy de acuerdo».